Nos hacemos presa de lo que sentimos, mientras la tormenta con los años nos destroza, los años son la marca de quienes dejamos de ser y mientras soy recuerdo con falso animo a mi otro yo, ese de tantas noches, tantos días y espacios en el tiempo sin nombre. ¿Porque el bote lejos y cerca de la orilla? No lleva ni pescadores ni cargamento. Ahora el sol se hace el valiente y se me queda mirando fijamente.
Es un día de verde aire , ya no tengo miedo, solo una leve catatonia cada cierto tiempo.
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